LA PREVENCIÓN: NUESTRA MEJOR ARMA
Estimados amigos,
En esta sección os presentamos unas recomendaciones generales para evitar los síntomas en caso de alergia a los ácaros del polvo. Recordar que lo más importante es la prevención, por lo que tendremos que evitar en la medida de lo posible exponernos a estos pequeños animales microscopicos que viven en lugares húmedos, calientes y oscuros, y que se alimentan de restos de piel humana y de mascotas.
Ácaro responsable de la alergía al polvo
En caso de no poder evitar esta exposición, podemos tomar la medicación, pero siempre bajo la supervisión de nuestro médico o farmacético.
CONSEJOS EN EL HOGAR PARA EL PACIENTE ALÉRGICO
Ventilar bien la casa y evitar la humedad con deshumidificadores.
Evitar inhalar sprays, olores fuertes, tabaco, insecticidas, etc.
Evitar moquetas, alfombras, tapicerías, cortinas, mantas de lana o plumas y muñecos de peluche. Si esto no es posible, limpiarlos o aspirarlos a menudo.
Proteger almohadas y colchones con fundas impermeables a ácaros.
Procurar que las plantas de casa estén libres de polvo y moho.
Evitar animales de pelo o pluma en casa. Si esto no es posible, intentar que no entre en su dormitorio y evitar que se tumbe sobre alfombras ni tapicerias. Delegar la limpieza de la mascota y su cesto de dormir en otra persona.
CONSEJOS DE LIMPIEZA DEL HOGAR PARA EL PACIENTE ALÉRGICO
Es recomendable que alguien limpie por nosotros cuando no estamos en casa, y que luego no entremos en casa hasta pasadas 3 o 4 horas de la limpieza. Si esto no es posible, es mejor que para limpiar empleemos una mascarilla.
No usar escobas, plumeros ni nada que levante polvo: quitar el polvo con un trapo húmedo y aspirar a menudo la casa. El aspirador debe tener filtros capaces de retener a los ácaros.
Limpiar regularmente la nevera y eliminar alimentos enmohecidos.
Limpiar con lejía las superficies con moho.
Secar rápidamente el agua de grifos que goteen.
Lavar las sábanas dos veces por semana a 60ºC.